
De lo uno y de lo otro tenemos clara experiencia. Del peligro no hay que tratar: la virtud y valor de Vuestra Merced nos hace bien seguros; la dificultad, que es mucha, trabajaré yo de quitar cuanto alcanzaren mis fuerzas, que son bien pequeñas. Cosa sabida y confesada por todos es que en estos Cantares, como en persona de Salomón y de su esposa, la hija del rey de Egipto, debajo de amorosos requiebros, explica el Espíritu Santo la Encarnación de Cristo y el entrañable amor que siempre tuvo a su Iglesia, con otros misterios de gran secreto y de gran peso. Solamente trabajaré en declarar la corteza de la letra, así llanamente, como si en este libro no hubiera otro mayor secreto del que muestran aquellas palabras desnudas, al parecer, dichas y respondidas entre Salomón y su esposa. Porque se ha de entender que este libro en su primera origen se escribió en metro, y es todo él una égloga pastoril, adonde con palabras y lenguaje de pastores, hablan Salomón y su esposa, y algunas veces sus compañeros, como si todos fuesen gente de aldea. Hace dificultoso su entendimiento, primeramente, lo que suele poner dificultad en todos los escritos adonde se explican algunas grandes pasiones o afectos, mayormente de amor, que, al parecer, van las razones cortadas y desconcertadas; aunque, a la verdad, entendido una vez el hilo de la pasión que mueve, responden maravillosamente a los afectos que exprimen, los cuales nacen unos de otros por natural concierto.
Sin contar la importancia capital que tuvo en el Reino de León —heredado de una legión romana que recibía el nombre de este animal— y en otros reinos españoles. Las primeras representaciones conocidas del león en la Península Ibérica se remontan a las tribus íberas que los usaban frecuentemente para sus esculturas en piedra. Un ejemplo célebre es el león de Pozo Moro Albacete , que faceta parte de la esquina de un monumento funerario. Con la llegada de la Edad Media, la iconografía báscula fue heredada por varios reinos cristianos. No alude al animal felino así denominado, sino al establecimiento en tierras leonesas de la «Legión Gemina Felix Romana». Pero el uso del valiente no fue exclusivo de los reinos cristianos, como así lo demuestra « El Patio de los leones » de la Alhambra.
Vida del P. Pedro de León S. La justicia en la Sevilla del s. Allí asistía a los presos, intercedía por ellos y los confesaba antes de morir. Al fin de su vida, enya jubilado, con 72 años a sus espaldas y por orden de sus superiores, escribe su memoria pastoral.