
La mayoría, independientemente del género u orientación, se ha excitado con la idea de realizarlo o ya lo han hecho comprobando lo gratificante que puede ser. Un estudio reciente publicado en la revista ' Evolutionary Psychological Science ' ofrece algunas respuestas a esta pregunta. Los investigadores encuestaron a estudiantes universitarios de Nueva York acerca de sus actitudes y experiencias con el sexo duro consensuado. En otras palabras, no estamos hablando de comportamientos en los que la gente realmente quisiera dañar a su pareja. De hecho, la gente que lo probó había disfrutado realmente de este tipo de actividad. Los participantes en este estudio recibieron una larga lista de posibles factores desencadenantes del sexo duro y se les pidió que anotasen si alguna vez su pareja les pidió tenerlo por alguna razón concreta. Estos datos sugieren que a manudo se trata de alimentar nuestra necesidad de novedad sexual. Los humanos, hombres y mujeres por igual, tienden a cansarse de las rutinas sexuales. Necesitamos seguir innovando para mantener la excitación, un fenómeno que los expertos denominan el efecto Coolidge.
Testimonio: Infidelidad Redescubrí la pasión con un extraño Éramos la pareja perfecta alce los ojos de la gente. Empero mi vida sexual era de pena. Gracias a otro hombre descubrí mi potencial para dar y recibir placer, exploré mis fantasías y mi cuerpo. Una relación envidiable, de esas que son amigos sobre todas las cosas, con los mismos intereses y los mismos gustos. Pero algo faltaba. Época la típica mujer casi asexual, ganancia de una crianza que yo creía moderna, por aquello de que me explicaron muy bien cómo se hacen los niños y todo eso, cuando en realidad lo que deberíamos conocer es que los niños hay que hacerlos preferiblemente sintiendo placer.
Así es El buen sexo para ellas 2. Y te van a dar grandes ideas Se pueden tener amistades realmente satisfactorias, simplemente hay que guardar con algunos de los deseos ocultos de las féminas. Se pueden adeudar relaciones realmente satisfactorias , simplemente hay que tratar de cumplir con algunos de los deseos ocultos de las féminas. Tienes dos opciones: preguntar o prestar atención a lo que viene a continuación. Especialmente tras una confusión de fiesta bien rehogada de alpiste, el hedor de las bocas de sus acompañantes de cama se hace demasiado incómodo como para que puedan dejarse llevar por el placer. Exacto, el tradicional misionero nunca pasa de moda. Claro que no vale con echarse encima y moverse a su gusto.